El Yoga es una disciplina que nos conecta con la verdad, su búsqueda es uno de sus preceptos. Esta búsqueda nos acerca a la idea de dios, unidad, absoluto.
Yoga es la máxima expresión de completitud, unión con tu verdadera esencia, la internalización de lo divino.
La mayoría de las teorías y/o filosofías espirituales, hablan de negar el yo individual para trascenderlo (alcanzando al Yo Universal).En particular, me gustaría no tener que negar nada, sino simplemente aceptar que nuestra humanidad nos ha sido dada para llegar a la perfección, a la energía absoluta, y nuestro libre albedrío nos permitirá elegir el camino.
Esto implica que la idea de dios (lo absoluto), no pueda escindirse de nuestra naturaleza, es decir, ser conscientes que lo ilimitado no es lo opuesto de lo limitado sino que lo contiene.
El Yoga es para todos, es una elección de vida, una metodología, filosofía y un arte. Nos hace mas fuertes, más nobles… más humanos.
El tránsito por este sendero terrenal, se hace más liviano de su mano, y nos permite alimentar la empatía, ecuanimidad y serenidad, tan necesarias para vivir felices.
Afortunadamente, hay muchas maneras de asir sus enseñanzas, quienes practicamos Hatha Yoga, lo hacemos a través del cuerpo, y utilizamos otras técnicas fundamentales como la repetición de cantos devocionales y el estudio de los textos sagrados, que en sí mismos también son Yoga.
Si estás practicando Yoga, ya estás en el camino de búsqueda, pero si estás buscando el camino, te invito a que indagues en esta ciencia milenaria que ha echado tanta luz durante más de 5000 años.